Los Por Qué del Quebrantamiento - Introducción

"Y dijo David a Saúl: No desmaye el corazón de ninguno a causa de él; tu siervo irá y peleará contra este filisteo” 1 SAMUEL 17: 32

"Y David subió la cuesta de los Olivos; y la subió llorando, llevando la cabeza cubierta y los pies descalzos. También todo el pueblo que tenía consigo cubrió cada uno su cabeza, e iban llorando mientras subían." 2 SAMUEL 15: 30

En éstos dos textos sobre David vemos una marcada diferencia sobre dos etapas de su vida. En la primera vemos el niño lleno de una fe y confianza absoluta en su Dios. El guerrero de Dios capaz de enfrentar lo que sea sin importar las consecuencias pues sabe que los resultados le pertenecen a Dios. “Suda” la seguridad que proviene de estar en la voluntad de Dios. En la segunda vemos el hombre desgastado por su pecado, perseguido por la culpa y escapando de las consecuencias  de haber menospreciado al Dios que lo cuidó, lo protegió y lo hizo Rey. "Por lo cual ahora no se apartará jamás de tu casa la espada, por cuanto me menospreciaste, y tomaste la mujer de Urías heteo para que fuese tu mujer." 2 SAMUEL 12: 10

¿Qué pasó?  ¿Cómo un hombre “conforme al corazón de Dios” termina menospreciando a Dios? ¿Cómo un hombre que cortó la cabeza de un gigante ahora huye de su propio hijo que viene a matarlo? Este proceso que de victorias consecutivas se convierte en uno de derrotas inevitables, de tenerlo todo a perderlo todo, de estar en palacio a estar en el desierto, éste proceso se llama quebrantamiento.

¿Qué es quebrantamiento? Quebrantar se utiliza en la Biblia para     expresar la idea de romper algo que es rígido, firme, sólido. Lo que se rompe queda en partes, pero reconocible. Distinto a desmenuzar que quedan partículas y tal vez el objeto original no se puede reconocer. Dios utiliza la palabra para una acción de inutilizar o anular aquello que se opone o es contrario a Dios. Por eso se usa en la Biblia para los enemigos de Dios y de su pueblo. Pero también se usa contra aquello en el pueblo de Dios que se interpone entre Dios y los suyos.

Ejemplos:

"Y quebrantaré la soberbia de vuestro orgullo, y haré vuestro cielo como hierro, y vuestra tierra como bronce. LEVÍTICO 26: 19                                                                                       

"Y Jehová enviará contra ti la maldición, quebranto y asombro en todo cuanto pusieres mano e hicieres, hasta que seas destruido, y perezcas pronto a causa de la maldad de tus obras por las cuales me habrás dejado." Deuteronomio 28: 20

"El fruto de tu tierra y de todo tu trabajo comerá pueblo que no conociste;y no serás sino oprimido y quebrantado todos los días" Deuteronomio 28:33

"Pues por no haberlo hecho así vosotros la primera vez, Jehová nuestro Dios nos quebrantó, por cuanto no le buscamos según su ordenanza."     1 Crónicas 15:13

"Antes del quebrantamiento es la soberbia, Y antes de la caída la altivez de espíritu." PROVERBIOS 16: 18

"Antes del quebrantamiento se eleva el corazón del hombre, Y antes de la honra es el abatimiento." PROVERBIOS 18: 12

No importa cuán larga es la lista de cosas que se puedan interponer entre nosotros y Dios, todo se resume en orgullo, soberbia, rebeldía, obstinación; en fin, nuestra voluntad. De ahí que la Biblia nos habla de quebrantamiento de una forma favorable. "Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón; Y salva a los contritos de espíritu." SALMOS 34: 18, “Los sacrificios de Dios son el espíritu quebrantado; Al corazón contrito y humillado no despreciarás tú, oh Dios." SALMOS 51: 17, “Porque así dijo el Alto y Sublime, el que habita la eternidad, y cuyo nombre es el Santo: Yo habito en la altura y la santidad, y con el quebrantado y humilde de espíritu, para hacer vivir el espíritu de los humildes, y para vivificar el corazón de los quebrantados." ISAÍAS 57: 15

¿Por qué el quebrantamiento nos acerca a Dios? Porque el quebrantamiento rompe nuestra voluntad, nos trae a un estado de suspensión de nuestros deseos, caprichos y anhelos. Deja el camino libre para que Dios pueda trabajar, restaurar, perfeccionar, mejorar o hasta traernos a un mayor estado de intimidad con Él.

Volviendo a David. David “se tiró” la mujer de uno de sus guardaespaldas, lo mandó a matar y lo encubrió. Un 9/11 “entre panas”. Los políticos no han cambiado mucho en los últimos cinco mil años. En 2 Samuel 15 Vemos como Dios quebranta a un hombre “conforme a su corazón” que pecó. David era un guerrero victorioso que en algún momento pensó que se debía a su propio talento. Así que Dios decidió destruir al guerrero. En los caps. anteriores vemos la lectura de cargos y la sentencia. En el 15:14 vemos que no quiso enfrentar a Absalón. En el 18:5 no quiso matarlo. En el 16:6-13 y 19:22-23, no quiere matar a Simei. En 1 1-4 Reyes 1:4 pudiera ser que Dios quebranto al mujeriego en él.  Vemos que el guerrero “murió”. Que sepamos por el registro bíblico, aunque dió órdenes de matar a otros, no volvió a matar a nadie. La “receta “aplicada por Dios redujo al guerrero y al promiscuo. Lo que dañó la relación entre Dios y David fue desarraigado. El gran guerrero se encontró desamparado y en huida. Qué diferencia entre el David que huía de Saúl y el David que huía de Absalón. Dios nos “deja en la calle”. Nos despoja de todo lo que es nuestra confianza de tal manera que nos veamos obligados a confiar exclusivamente en Él.

Dios ataca lo que se interpone cuando nos quebranta. Les dije que es nuestra voluntad. Por eso casi siempre la receta es humillación y despojo. Duele, pero la humillación es lo que fastidia nuestro yo. 

En el NT se usa poco la palabra quebrantamiento excepto citando el Viejo en el mismo sentido.  En el NT se nos ahorra la búsqueda de solución al problema de qué nos puede interrumpir nuestra relación con Dios.

"Entonces Jesús dijo a sus discípulos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y tome su cruz, y sígame. "Porque todo el que quiera salvar su vida, la perderá; y todo el que pierda su vida por causa de mí, la hallará."  SAN MATEO 16: 24-25

"De cierto, de cierto os digo, que si el grano de trigo no cae en la tierra y muere, queda solo; pero si muere, lleva mucho fruto. "El que ama su vida, la perderá; y el que aborrece su vida en este mundo, para vida eterna la guardará." SAN JUAN 12 :24- 25

"Ten cuidado de ti mismo y de la doctrina; persiste en ello, pues haciendo esto, te salvarás a ti mismo y a los que te oyeren." 1 TIMOTEO 4: 16

 El NT nos economiza pasar por el quebrantamiento al señalarnos que de un principio hay que cancelar el yo. Pablo habla de morir como la forma de ser útiles y hábiles para Dios. "porque si vivís conforme a la carne, moriréis; más si por el Espíritu hacéis morir las obras de la carne, viviréis." ROMANOS 8 : 13 ,  "Os aseguro, hermanos, por la gloria que de vosotros tengo en nuestro Señor Jesucristo, que cada día muero." 1 CORINTIOS 15 : 31,  "y por todos murió, para que los que viven, ya no vivan para sí, sino para aquel que murió y resucitó por ellos." 2 CORINTIOS 5 : 15,  "Haced morir, pues, lo terrenal en vosotros: fornicación, impureza, pasiones desordenadas, malos deseos y avaricia, que es idolatría;"  COLOSENSES 3 : 5,  "quien llevó él mismo nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros, estando muertos a los pecados, vivamos a la justicia; y por cuya herida fuisteis sanados." 1 SAN PEDRO 2 : 24

En otras palabras, el NT nos encarga a nosotros la responsabilidad de hacer morir lo que estorba la relación con Dios. Si no lo hacemos entonces Dios nos quebranta. Si no ponemos el yo en su lugar, Dios lo hace. Las herramientas que Dios nos da para trabajar con nuestra voluntad son la obediencia y la humillación. Eso lo veremos más adelante.

También tenemos que redefinir el concepto de grandeza. Los hombres que consideramos grandes en la Biblia, no fueron grandes, fueron obedientes y creyeron a Dios. Nosotros los consideramos grandes, pero ellos solo echaron a un lado la grandeza para alcanzar a Dios. "Por la fe Moisés, hecho ya grande, rehusó llamarse hijo de la hija de Faraón, escogiendo antes ser maltratado con el pueblo de Dios, que gozar de los deleites temporales del pecado, teniendo por mayores riquezas el vituperio de Cristo que los tesoros de los egipcios; porque tenía puesta la mirada en el galardón." HEBREOS 11 :24- 26, “Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús,” FILIPENSES 2: 5, "Pero cuantas cosas eran para mí ganancia, las he estimado como pérdida por amor de Cristo." FILIPENSES 3: 7

Jesús nos advierte sobre creernos algo.  "¿Quién de vosotros, teniendo un siervo que ara o apacienta ganado, al volver él del campo, luego le dice: ¿Pasa, siéntate a la mesa? ¿No le dice más bien: Prepárame la cena, cíñete, y sírveme hasta que haya comido y bebido; ¿y después de esto, come y bebe tú? ¿Acaso da gracias al siervo porque hizo lo que se le había mandado? Pienso que no. Así también vosotros, cuando hayáis hecho todo lo que os ha sido ordenado, decid: Siervos inútiles somos, pues lo que debíamos hacer, hicimos."  LUCAS 17: 7-10, “Mas entre vosotros no será así, sino que el que quiera hacerse grande entre vosotros será vuestro servidor," MATEO 20 : 26

Para terminar “grandeza”, veamos al Bautista. "Y muchos venían a él, y decían: Juan, a la verdad, ninguna señal hizo; pero todo lo que Juan dijo de éste, era verdad." JUAN 10: 41. Juan no hizo ni un milagro. ¿Cuál fue su grandeza?  Dios le dio una única misión por un periodo de probablemente un año y terminar decapitado por el capricho de una mujer endemoniada; y lo cumplió. Eso es grandeza.

El quebrantamiento es evento, proceso, taller, terapia, desierto, pero la finalidad es una. Restaurar o perfeccionar tu relación con el Amo. ¿Cómo sabemos que está funcionando? Cuando en medio de la crisis “queremos llegar a la cumbre para adorar allí a Dios” 2 Sam. 15:32

En éste estudio vamos a ver nuestra naturaleza caída, cómo se interpone y las herramientas de Dios para quebrantarla.