Continuamos en esta sección viendo los textos en donde aparece el verbo escoger y elegir, y la palabra elección a ver si prueban la elección para salvación o perdición desde antes de la fundación del mundo. Nos quedamos en Rom. 8 :33. vamos a repasar Rom. 9-11 en donde se habla de Israel como escogido.
Leemos en Rom. 9:11, "(pues
no habían aún nacido, ni habían hecho aún ni bien ni mal, para que el propósito
de Dios conforme a la elección permaneciese, no por las obras sino por el que
llama)," Los que
necesitan la predestinación utilizan este verso como uno de los principales
para probar que la elección es incondicional, la cual, según su definición, no
depende de acción o mérito alguno por parte de la criatura, para que Dios lo
salvara o lo condenara. La lógica es como sigue: “como Dios eligió a Isaac
sobre Ismael para que Isaac fuera el heredero de la promesa y como ahí dice que
escogió a Jacob sobre Esaú, y que no dependió de que hubieran hecho algo para ganar o perder la
elección y como ahí dice que la elección fue hecha para que se cumpliese el
propósito, por lo tanto como el propósito de Dios no fue salvar a todos, para
que su propósito en salvar a unos y condenar a otros permaneciese, eligió a
quienes iba a salvar y a quienes iba a condenar para asegurar su propósito”.
El problema es establecer que se está hablando de salvación. Cuando
vemos el contexto inmediato vemos que está explicando por qué no todos los que
descienden de Abraham son contados como descendientes. "No que la palabra de Dios haya fallado;
porque no todos los que descienden de Israel son israelitas, ni por ser
descendientes de Abraham, son todos hijos; sino: En Isaac te será llamada
descendencia. Esto es: No los que son hijos según la carne son los hijos de
Dios, sino que los que son hijos según la promesa son contados como
descendientes. Porque la palabra de la promesa es esta: Por este tiempo vendré,
y Sara tendrá un hijo. Y no sólo esto, sino también cuando Rebeca concibió de
uno, de Isaac nuestro padre"
ROMANOS 9: 6-10 Entonces viene el 11,"(pues no habían aún nacido, ni habían hecho aún ni
bien ni mal, para que el propósito de Dios conforme a la elección permaneciese,
no por las obras sino por el que llama)," O sea, Dios eligió a
Isaac sobre Ismael porque ya tenía un propósito, y no era un misterio
escondido, fue la promesa hecha a Abraham que un hijo suyo y de Sara le iba a
heredar. Luego pone de ejemplo a Jacob sobre Esaú, dentro del mismo contexto;
quién heredaba la promesa. No está hablando de quién se salva o quién se
pierde. Los que utilizan este cap. para probar la elección incondicional luego
te señalan el verso 13,
"Como está escrito: A Jacob amé, mas a Esaú aborrecí.",
insinuando que Dios eligió la salvación de Jacob y la perdición de Esaú. De lo
que está hablando es de que
“el mayor servirá al menor” v.12. Luego señalan el 14, "¿Qué, pues, diremos? ¿Que
hay injusticia en Dios? En ninguna manera.". Con este refuerzan que
no hay ninguna injusticia en Dios por salvar a unos y condenar a otros, que es
la objeción principal a la idea de que Dios escogió arbitrariamente quien se
salva y quien se condena. Luego te señalan el 15 y el 16,
"Pues a Moisés dice:
Tendré misericordia del que yo tenga misericordia, y me compadeceré del que yo
me compadezca. Así que no depende del que
quiere, ni del que corre, sino de Dios que tiene misericordia." Con esos textos prueban que haber elegido a unos para salvación y a
otros no, fue un acto de misericordia y compasión de Dios y por lo tanto no
depende de acción o mérito de ninguno. Pero leyendo el
contexto inmediato vemos que es bien difícil establecer que se está hablando de
salvación. Cuando vemos el contexto de la carta desde el cap. 1 podemos
confirmar si la elección mencionada en el cap. 9 es elección para salvación.
Veamos como Pablo, después de venir hablando de la salvación desde el capítulo
1 llega a la elección de Israel en el cap. 9 y esa elección no es elección para
salvación.
Pablo está explicando por qué los judíos no se están salvando, habiendo
sido electos. Verso 6, "No
que la palabra de Dios haya fallado; porque no todos los que descienden de
Israel son israelitas,"
Pablo se desvía de toda la disertación que viene haciendo desde el cap.
1 de que el evangelio es poder de Dios para salvación de todo aquel cree para
explicar por qué el que los judíos no se estén salvando no significa que la
palabra de Dios haya fallado. El tema del cap. 9 no es establecer que la
salvación es por decreto sino cómo alguien elegido para recibir “la adopción, la gloria, el
pacto, la promulgación de la ley, el culto y las promesas, los patriarcas y por
quienes vino Cristo” (v. 4-5 y 11:29), “no alcanzaron la justicia” (9:31)
El tema no es por qué algunos gentiles que están escuchando el evangelio
no se están salvando. Eso se discutió ya en el principio de la carta. No se
salvan si no creen. Pablo va a utilizar lo que dejó establecido en el cap. 3 de
que a pesar de que “no hay
ninguno bueno ni que busque a Dios”, y a pesar de que “todos pecaron y están
destituidos de la gloria de Dios”, (v.3:10-23) Dios “justificará por la fe a los de
la circuncisión y por medio de la fe a los de la incircuncisión” (v.
3:30). Pablo dejó establecido que el que una condición de pecado universal no
impide que la salvación alcance al que cree. De la misma manera va a explicar
en el cap. 9 como una condición de elección irrevocable no impide que se pierda
el que no cree.
Precisamente porque alguien cree que la salvación de algunos está
predeterminada por la elección es que alguien al ver que esos elegidos no se
están salvando, levanta la pregunta o llega a la conclusión de que la palabra
está fallando. No está fallando, es que sencillamente la elección no salva. Eso
es lo que Pablo va a aclarar en el 9. Este argumento Pablo lo dejó en el aire
en cap 3:1-3
"¿Qué ventaja tiene,
pues, el judío? ¿o de qué aprovecha la circuncisión? Mucho, en todas maneras.
Primero, ciertamente, que les ha sido confiada la palabra de Dios. ¿Pues qué,
si algunos de ellos han sido incrédulos? ¿Su incredulidad habrá hecho nula la
fidelidad de Dios?" Aquí Pablo dejó
establecido que ser judío tiene ventaja; tienen la Palabra de Dios. Esa ventaja
no impide que sean incrédulos ni anula la fidelidad de Dios que en este caso es
la elección de los judíos. Pero también da por sentado que la ventaja no impide
que sean incrédulos. Por otro lado, deja claro que la ventaja no tiene que ver
con la salvación. En el v. 28 dice: “Concluimos,pues, que el hombre es justificado por fe sin las obras de
la ley”.
Pero por si acaso algún judío al ver que tiene ventaja y su incredulidad
no anula la fidelidad de Dios, pero ante el hecho de que no todos los judíos se
están salvando y llega a la conclusión de que la palabra a fallado, es que
Pablo trae el tema otra vez en el cap. 9. . Pablo va a ampliar su explicación
de la ventaja, el compromiso de Dios con esa ventaja, pero también por qué esa
ventaja no altera los términos de la salvación para los judíos que son los
mismos términos que para los gentiles. Pablo
explica que la palabra no es que ha fallado, es que la palabra que le da la
elección con sus promesas a la nación no garantiza la salvación en Cristo
aparte o de una manera distinta de la que le provee a los gentiles. La palabra
no ha fallado por no salvarlos porque la palabra nunca dijo que se salvarían
por ser judíos. Veamos los textos de 9:1 al 9:16.
"Verdad digo en
Cristo, no miento, y mi conciencia me da testimonio en el Espíritu Santo, que
tengo gran tristeza y continuo dolor en mi corazón. Porque deseara yo mismo ser
anatema, separado de Cristo, por amor a mis hermanos, los que son mis parientes
según la carne; que son israelitas, de los cuales son la adopción, la gloria,
el pacto, la promulgación de la ley, el culto y las promesas; de quienes son
los patriarcas, y de los cuales, según la carne, vino Cristo, el cual es Dios
sobre todas las cosas, bendito por los siglos. Amén." (1-5) ¿De quién está hablando? De los parientes según la carne. No está
hablando de “nosotros la iglesia” como lo ha venido haciendo en toda la carta.
Tampoco está hablando de los gentiles, ni de los que se salvan ni de los que se
pierden. Lo otro que hay que mencionar es que entre las “ventajas” no se
menciona la salvación. Alguien refutará diciendo que la adopción es la
salvación. No. Ya vimos en el 8:23 que la adopción no es la salvación. Es algo en el futuro de lo cual nosotros
vamos a participar. Es distinto a ser hijos. Somos hijos y por tener EL
ESPÍRITU DE ADOPCIÓN, podemos decir Abba padre. (8:15)
Luego viene el 6, "No
que la palabra de Dios haya fallado;” La palabra de Dios no ha fallado,
es que le están atribuyendo un significado distinto. Y pasa a aclarar. “porque no todos los que descienden de Israel son israelitas, ni por
ser descendientes de Abraham, son todos hijos; sino: En Isaac te será llamada
descendencia. Esto es: No los que son hijos según la carne son los hijos de
Dios, sino que los que son hijos según la promesa son contados como
descendientes. Porque la palabra de la promesa es esta: Por este tiempo vendré,
y Sara tendrá un hijo. Y no sólo esto, sino también cuando Rebeca concibió de
uno, de Isaac nuestro padre (pues no habían aún nacido, ni habían hecho aún ni
bien ni mal, para que el propósito de Dios conforme a la elección permaneciese,
no por las obras sino por el que llama), se le dijo: El mayor servirá al
menor." (6b-12)
Para empezar, la descendencia por la carne no tiene que ver nada con
participar de la promesa; hay que ser descendiente de el hijo prometido.
Segundo; tienes que haber sido elegido para ser parte del propósito y esa
elección no depende de ti ni de lo que hagas, depende de Dios. Aquí los de la
predestinéutica ven elección para salvación, pero lo único que hay que ver en
esta elección es la elección de Israel para cumplir la promesa hecha a Abram, “en ti serán bendecidas todas
las familias de la tierra” Gen. 12:3. La elección no es para salvarlos
sino para traer la bendición a todas las familias de la tierra a través de
ellos. De ahí que Pablo dice en el 5 “y de los cuales, según la carne, vino Cristo”.
“El mayor servirá al
menor” no tiene que ver con salvación. La salvación no viene
por ser judíos. Por lo tanto, la elección para ser judío no es elección para
salvación.
"Como está escrito: A
Jacob amé, mas a Esaú aborrecí." (13). Aquí
tenemos que aclarar que tampoco habla de salvación. Este texto es de Malaquías,
siglos después, por lo tanto, no podemos asumir que porque Dios los eligió para
que el mayor sirviera al menor desde el vientre signifique que Dios amó a uno y
aborreció al otro desde el vientre. Es después de siglos en donde Esaú hizo
todo el daño posible a los israelitas que Dios dice “lo aborrecí”. Lo eligió
para que sirviera a su hermano menor desde el vientre y lo aborreció por todo
el daño hecho después de nacer.
"¿Qué, pues, diremos?
¿Qué hay injusticia en Dios? En ninguna manera. Pues a Moisés dice: Tendré
misericordia del que yo tenga misericordia, y me compadeceré del que yo me
compadezca. Así que no depende del que quiere, ni del que corre, sino de Dios
que tiene misericordia."(14-16) Pablo
cuestiona, ¿hay injusticia en éste tipo de elección? No. Dios elige para un
propósito como quiere. ¿Está hablando de elegir a alguien para salvarlo o
condenarlo? No. ¿Está hablando de que tener misericordia y compadecerse es
sinónimo de salvar o condenar? No. En el 11:32 leemos "Porque Dios sujetó a todos en desobediencia,
para tener misericordia de todos." Misericordia no significa
salvación pues no todos se salvan. Cuando ese texto aparece en Ex. 33:19 es
cuando Moisés pide a Dios ver su gloria y Dios le dice que hará pasar todo su
bien delante de Moisés y le dice esas palabras y ahí tampoco tiene que ver con
la salvación. Ya en el capítulo anterior Dios le había dicho que al que pecare,
a ése raería del libro de la vida. Si misericordia tuviera que ver con
salvación está sujeto al contexto de esa ocasión cuando Dios dijo que iba a
destruir a todo el pueblo y Moisés intercedió y Dios no destruyó a todo el
pueblo. Misericordia es cuando Dios no da el castigo que se merece y da el
perdón que no se merece. Y ¿éso no es lo mismo que salvación? Depende del
contexto. En el 11:32 misericordia no es salvación pues ningún desobediente se
salva, en especial los que desobedecen al evangelio como denuncia en el 10:16 “mas no todos obedecieron”
y confirma en 16:26, "pero
que ha sido manifestado ahora, y que por las Escrituras de los profetas, según
el mandamiento del Dios eterno, se ha dado a conocer a todas las gentes para
que obedezcan a la fe," 16: 26
Luego pasa Pablo a traer el ejemplo del endurecimiento de Faraón para ampliar el propósito que Dios
puede tener para elegir a alguien y tampoco incluye la salvación de Faraón como
tampoco incluye la salvación o condenación de los judíos con su endurecimiento.
"Porque la Escritura
dice a Faraón: Para esto mismo te he levantado, para mostrar en ti mi poder, y
para que mi nombre sea anunciado por toda la tierra." ROMANOS 9: 17 Lo primero que yo me pregunto
es; ¿qué tiene que ver que Dios haya levantado a Faraón para mostrar su poder y
anunciar su nombre por toda la tierra, con que Dios predestinó los que se van a
salvar y los que se van a perder? Nada. Pero vamos a seguir. "De manera que de quien
quiere, tiene misericordia, y al que quiere endurecer, endurece."
(18). El que usa este texto para probar la elección incondicional para
salvación o perdición dice: “ahí está”. “Dios muestra su misericordia a sus
escogidos para salvarlos y a los que no quiere salvar, los endurece”. El
problema es que el que Dios haya levantado a Faraón para mostrar su poder y
anunciar su nombre, no tiene que ver nada con la salvación de Faraón. Pero
continuemos con el 19-24. "Pero
me dirás: ¿Por qué, pues, inculpa? porque ¿quién ha resistido a su voluntad?
Mas antes, oh hombre, ¿quién eres tú, para que alterques con Dios? ¿Dirá el
vaso de barro al que lo formó: ¿Por qué me has hecho así? ¿O no tiene potestad
el alfarero sobre el barro, para hacer de la misma masa un vaso para honra y
otro para deshonra?¿Y qué, si Dios, queriendo mostrar su ira y hacer notorio su
poder, soportó con mucha paciencia los vasos de ira preparados para
destrucción, y para hacer notorias las riquezas de su gloria, las mostró para
con los vasos de misericordia que él preparó de antemano para gloria, a los
cuales también ha llamado, esto es, a nosotros, no sólo de los judíos, sino
también de los gentiles?" Cuando examinamos el 19, vemos que
presenta un cuestionamiento, no de él, sino de alguien que pregunta, por qué
Dios inculpa si nadie puede resistir su voluntad. La respuesta, como ya dije,
no incluye la salvación sino por qué Dios escoge para destruir a unos y a otros
no, que es el caso de Faraón. Pablo contesta que uno no se cuestiona por qué
Dios hace a unos para honrarse y a otros no. El argumento no es por qué Dios
formó a unos para salvarlos y a otros para condenarlos. Es por qué formó a unos
para El glorificarse con la destrucción de ésos y glorificarse con la
misericordia de los que no destruye. Cuando habla de vasos de honra y de
deshonra, no está hablando de honrarlos y deshonrarlos según lo que Dios
está haciendo en cada uno para glorificarse. ¿Cómo lo sé?. Porque cambia de
hablar de vasos de honra y deshonra a vasos de ira y vasos de misericordia. El
22 dice "¿Y qué, si
Dios, queriendo mostrar su ira y hacer notorio su poder, soportó con mucha
paciencia los vasos de ira preparados para destrucción,”? Vemos que
sigue el argumento no de salvación sino de que para “mostrar su ira y hacer
notorio su poder”, ( se me parece al verso 17, cuando dice, para mostrar en ti mi poder, y
para que mi nombre sea anunciado por toda la tierra.") hizo vasos
de ira preparados para destrucción. En el 23 sigue, "y para hacer notorias las riquezas de su
gloria, las mostró para con los vasos de misericordia que él preparó de
antemano para gloria," y aquí sigue usando el argumento no de
salvación sino de que para glorificarse preparó vasos de misericordia. Los que
necesitan la predestinación inmediatamente señalan “que los preparó de
antemano” para probar que los eligió para salvarlos y señalan el 24 que dice “a los cuales también ha
llamado, esto es, a nosotros, no sólo de los judíos, ¿sino también de los
gentiles?" y con estos dos últimos textos cierran su argumento de
que el pasaje prueba la elección incondicional.
¿Por qué me cuestiono que no está hablando de elección
incondicional? Por la frase “a los cuáles también ha
llamado”. Si no existiera esa frase ni el resto del capítulo anterior al
verso 17, parecería que tuvieran un argumento incuestionable. ¿Por qué es
cuestionable? Si recuerdan el análisis que hice del cap. 8 versos del 28-30,
(Parte 12), el que llamara después de predestinar descarta que predestinara
individuos, predestinó condiciones, premios, herencia. Voy a transcribir el
párrafo. “y los predestinó para luego
llamarlos, Rom. 8:30, ¿Por qué los llamó después de predestinarlos y no antes?
Primero; porque hizo seres libres para que le amaran. Sin libertad, el amor no
existe pues amor obligado no es amor. Por lo menos en mi mente caída no cabe
tal cosa como amor obligado. A lo mejor en la mente de los que necesitan la
predestinación cabe llamar amor a un sentimiento robótico programado por Dios
en la mente de sus escogidos. Segundo; porque no predestinó individuos sino
condiciones; requisitos. Llama después a los que quieran cumplir con los
requisitos. Tercero, ¿Por qué los llamó y no los escogió o los salvó de
antemano según el modelo de la predestinación? Llamar es el verbo kaleo (Strong’s
2564) y es llamar, poner un título o nombre, designar una categoría, invitar,
convidar, etc., pero no obliga o destina al llamado y no depende tan siquiera
de la participación de la persona u objeto llamado como en los convidados en la
parábolas de las bodas y la cena o como en el caso de los gálatas en Gál. 1:6 y
5:8 que se volvieron de su llamado, o de Israel que habiendo sido elegidos y
teniendo un llamamiento irrevocable (Rom. 11:29), solo el remanente será salvo
(9:27) y no han alcanzado la justicia (11:31). Cuando tú preparas algo para
alguien y lo llamas para que participe o lo reciba o lo acepte, tú no lo
secuestras. Esperas que responda. Fíjate que predeterminó, pero no pre-llamó,
no pre-justificó y no pre-glorificó. ¿Por qué? Porque como ya he explicado, el
no creó los acontecimientos de antemano. El no creó el futuro. El determinó de
antemano las condiciones para reconciliar al mundo con El y predeterminó los
requisitos y mecanismos para los que respondieran. No creó ninguno de los
eventos y mucho menos eligió individuos. Si no el 30 hubiera dicho: a los que
predestinó, los salvó. De hecho, la palabra salvación no aparece en cap. 8.
Volviendo a Rom. 9:23 y 24, cuando leemos que nos incluye en los vasos
de misericordia que preparó de antemano para gloria (no para salvarnos), sino
para mostrar en nosotros las riquezas de su gloria, podemos concluir que de
antemano el preparó mostrar las riquezas de su gloria en los vasos de
misericordia, que no son vasos de misericordia por que los escogió para
salvarlos, sino porque decidió que los que respondieran el llamado, serían
incluidos en los vasos de misericordia. De la misma manera que en Rom. 8 vemos
que predestinó condiciones y luego llama, aquí vemos que Dios para mostrar su
gloria incluyó en los vasos de misericordia a los que respondieran el llamado.
Repasando; Faraón no fue levantado para salvarse o perderse. No es el
tema. Dios quiere mostrar en Faraón su poder y anunciar su nombre. Dios tiene
misericordia de quien quiere y a quien quiere endurecer endurece. ¿Para salvar
a Faraón? No ¿Pudo haber tenido misericordia de Faraón? Si Faraón hubiera
querido. Pero Faraón ya había escogido endurecerse antes de que Dios lo
endureciera. Dice en Ex. 4:21 "Y dijo Jehová a Moisés:
Cuando hayas vuelto a Egipto, mira que hagas delante de Faraón todas las
maravillas que he puesto en tu mano; pero yo endureceré su corazón, de modo que
no dejará ir al pueblo." Ahí dice que Dios endurecerá después de
las señales. "Y yo
endureceré el corazón de Faraón, y multiplicaré en la tierra de Egipto mis
señales y mis maravillas." 7:3 Aquí dice que lo va a endurecer pero
es después de haberle hablado a Faraón. "Tú dirás todas las cosas que yo te mande, y Aarón
tu hermano hablará a Faraón, para que deje ir de su tierra a los hijos de
Israel." 7: 2
Luego vemos a Faraón endurecerse en 7:13 y 22, 8:15, 19, y 32. En estos
versos leemos que Faraón se endureció como había dicho Dios y los que usan
predestinéutica al leer que lo que Dios dijo fue “yo endureceré”, significa que
no fue Faraón quien se endureció sinendureció, lo endureció en todas las
ocasiones. Pero se olvidan de que quien escribió fue Moisés mucho después de
los sucesos y Moisés sabía el orden y las causas de lo que había pasado. Siendo
tan detallista en todo lo que escribió; ¿cómo cometió el error de escribir que
Faraón se endureció si sabía que Dios lo endureció? Lo curioso es que no hizo
nada por enmendar el “error”. Lo repitió en Ex. 13:15, "y endureciéndose Faraón para no dejarnos ir,
Jehová hizo morir en la tierra de Egipto a todo primogénito, desde el
primogénito humano hasta el primogénito de la bestia; y por esta causa yo
sacrifico para Jehová todo primogénito macho, y redimo al primogénito de mis
hijos." Moisés no solo no corrigió el error sino que mandó que así
se enseñara para siempre en Israel. "Y cuando mañana te pregunte tu hijo, diciendo: ¿Qué es esto?, le
dirás: Jehová nos sacó con mano fuerte de Egipto, de casa de servidumbre;(14)
No fue un error lo que Moisés escribió. El error si alguno es que Dios no le
dijo a Moisés que siglos mas tarde los calvinistas no iban a encontrar en sus
escritos y que después Pablo iba a citar, evidencia de la elección
incondicional. Si Moisés mejor que nadie
sabía que nada ocurre fuera del control de Dios nunca debió haber usado el
verbo endurecer como una acción de Faraón.
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